miércoles, 8 de marzo de 2017

EMBARAZO SEMANA 11 A LA 15

SEMANA 11

Después de la visita con la matrona, ya sólo me quedaba esperar a la doppler, para la semana 12, pero me llamaron de mi clínica informándome que la doctora que me iba a realizar la eco no podía asistir, y tenían que adelantarme la cita. La doppler se puede hacer entre la semana 11 y la 13, por lo que me dieron cita para la semana 11, concretamente para un jueves (las semanas las cumplo los miércoles).

En la semana 10 + 5 (lunes) me llevé mi primer sustito en el embarazo (y espero que no sean muchos…). Después de almorzar, me acosté la siesta y al ir al baño y limpiarme me veo en el papel  restos de sangre…yo no había hecho nada de esfuerzos ni nada diferente…¿a qué viene esa sangre? Me temí lo peor, creía que ya se iban a acabar todas mis ilusiones, me creía que lo perdía…

Llorando me fui a Urgencias, lo más rápida que pude, consciente de que era muy normal sangrar durante el embarazo, pero el impacto de vivirlo en tu propio cuerpo es muy desagradable, piensas que algo no va bien.

A la hora y media de espera en la clínica Viamed, me toca una ginecóloga muy agradable. Le transmito que estoy muy asustada y que en las 10 semanas de embarazo no he sangrado.  Me hace unas preguntas para añadirlo a mi historial, y después me dice que me suba al potro de exploración. Lo primero que hizo es comprobar cuánta sangre estaba expulsando. Para ello te introducen como una especie de algodón para mirar cuánto manchas. Me dijo que era un sangrado leve, menor que la regla y que se me estaba cortando. 

Acto seguido comprobó que tenía el cuello del útero muy fino, y que cualquier gesto que hiciera podría desgarrarse un poco y sangrar, por lo que tenía que tener cuidado tanto en hacer grandes esfuerzos,  como si fuera a mantener relaciones sexuales. Yo le dije que no las manteníamos porque me lo desaconsejó mi ginecólogo al tener los ovarios estimulados para evitar su estrangulación.

Después de esto, me dijo que me iba a hacer una eco por si tenía algún daño en la placenta o por cualquier sitio.

Sonriendo me enseña a mi criatura, le escuchamos su corazoncito de nuevo a un ritmo normal y de repente me muestra sus manitas, sus deditos y sus piernas. Me dice que está todo correcto, que no hay lesión alguna. Esa fue la primera vez que lo vi. Me pongo a llorar de alegría. Y para completar la alegría me pregunta si queríamos saber lo que era. Asombrada le pregunto que si ya se ve, y me contesta que cree que sí, que ella estaba viendo un NIÑO…MI NIÑO.

A los dos días tenía la cita para realizarme la ECO Doppler. Previamente me tuve que realizar una analítica (el cribado) para detectar posibles malformaciones en el feto. “Cada vez a lo largo del embarazo se realizan más pruebas de screening (en inglés) o de cribado que dan a la embarazada un valor estadístico que informa de un riesgo. La cuestión es que los médicos informan de un valor numérico (generalmente expresado como 1 entre ….), y a veces esta expresión puede resultar difícil de entender por alguien no familiarizado con ese tema. A medida que avanza la investigación en el campo de la medicina fetal, disponemos de un mayor conocimiento que nos permite saber qué factores incrementan o disminuyen el riesgo de una patología en concreto, esto nos permite poder “afinar” más consiguiendo así un riesgo muy individualizado. Por ejemplo, sabemos que cuanta más edad tiene la madre, mayor será el riesgo de alteraciones cromosómicas en el feto, sin embargo, si se tiene en cuenta otros factores cruciales, como los marcadores ecográficos o los niveles sanguíneos de determinadas hormonas, nos pueden dar un resultado cuando se consideran de forma conjunta, mucho más fiable que si se tiene en cuenta la edad de forma aislada”.

Es decir, son valores estadísticos que pueden o no acertar, sólo son probabilidades.
En esta Eco se paran minuciosamente en cada parte del feto midiendo cada extremidad, su cráneo, y su espina dorsal.  Obtienen unas medidas en el ecógrafo que junto con las analíticas realizadas se tiene la probabilidad de riesgo en el embarazo de alguna malformación. A continuación os muestro una foto de las 10 que me dieron. Aquí me dijeron que había probabilidad de ¡NIÑA! …así que ni idea de lo que llevo aquí dentro. Mirad que diferencia con la última Eco, ¡¡cómo evoluciona!!


Después de obtener los resultados, concretamente a mí me dio riesgo bajo en dos de los tres indicadores, salvo en uno que me dio riesgo intermedio…
Me llamaron por teléfono para informarme sobre los resultados y por tener riesgo intermedio me recomendaron que me realizara o bien, una analítica de sangre que no cubría la compañía (500 euros aprox.) o una Eco doppler en la semana 16 que tampoco cubría (120 euros). Esta situación me hizo pensar y plantearme que para qué quería contar con tanta información…
En el caso que aceptara hacerme esas pruebas, y la probabilidad cambiara a “Alto riesgo”, ¿qué es lo que iba a hacer? ¿Abortar? NI LOCA. Eran sólo probabilidades, y cabe la posibilidad de error. Con todo lo que he luchado para conseguir donde estoy, no me iba a rendir con tanta facilidad. Voy a luchar hasta el final y que pase lo que tenga que pasar, que la naturaleza marque su ritmo.
SEMANA 12
Paralelamente en la Seguridad Social me repitieron los análisis en la semana 12. Me hicieron las mismas pruebas y como cabía de esperar, los tres indicadores me dieron riesgo bajo…En ese momento fue en el que decidí no realizarme ninguna prueba adicional. Menos mal que iba por los dos sitios, si no hubiera estado un poco intranquila hasta el final del embarazo.
En esta Eco no nos acordamos de preguntar qué era lo que parecía, si un niño o una niña, la verdad, nos daba igual, nosotros lo único que queremos es tener a nuestro sueño en nuestros brazos.

SEMANA 13
De nuevo me toca revisión con mi ginecólogo de la compañía privada para ver los resultados de la eco Doppler  junto con la analítica. Aún en este momento no me había llegado los resultados de la Seguridad Social, por lo que él me recomendó que me hiciera la ECO doppler 16 semanas.  Me hizo otra eco y pudo comprobar  que mis ovarios ya tenían tamaño normal, que ya podía hacer vida normal y que por fin podía dejar la PROGESTERONA ¡!!  ¡¡Qué alivio!! Me he llevado suministrándomela durante cerca de 4 meses cada 8 horas…
Os muestro nueva eco

Aquí se ve estupendamente, con su carita redondita… ¡me lo como!
El ginecólogo me comentó que probablemente sería un NIÑO….bueeeeno…. vamos 2  a 1…aún no me daban seguridad…
Por fin pasó el primer trimestre, y sin darme cuenta de nada, ni vómitos, ni mareos…sólo me he notado más cansada de lo normal, y cuando me llevaba mucho tiempo de pie, las ingles me molestaban. Pero por lo demás, muy muy bien. Sólo lo he notado en que he puesto unos 3 kilos (un kilo por mes….parece que vamos bien).

SEMANA 14
Como me dieron “el alta” para realizar vida normal, después de comprobar que mis ovarios se habían desinflado por la estimulación, pues yo hice caso al ginecólogo e intenté hacer mi vida normal, aunque siempre sin realizar grandes esfuerzos. Una de las cosas que echaba de menos en estas 14 semanas era tener relaciones con mi marido, por lo que me puse manos a la obra, obra que desencadenó en otro pequeño susto…Tuve una hemorragia inferior a la regla, y muy escandalosa (era de color rojo brillante, claramente, una herida), por lo que no tuve más remedio que acercarme de nuevo a urgencias, ya que estaba muy asustada.
Al llegar, me hicieron el mismo procedimiento que la otra vez. Primero me introducen como una especie de algodón para saber la cantidad de sangre expulsada. Ésta vez era mayor cantidad que la vez anterior. La ginecóloga me sacó hasta un cuajarón de sangre…
Me hizo eco y vio que todo estaba bien, todo normal, los daños sólo eran externos. Como tengo la cérvix muy fina, cualquier roce hace que se me abra una herida, y como el riego sanguíneo es alto por esa zona, la cantidad de sangre que se expulsa llega a ser abundante.
Tras la explicación, mi marido y yo nos quedamos muy tranquilos, pero nos dijimos que las relaciones se tenían que acabar, ya que, aunque no nos las habían prohibido, nos exponíamos a un buen susto, porque aunque sepamos que es sólo superficial, nos queda la duda si nos pudiera perjudicar a nuestro sueño.

SEMANA 15
Van pasando los días sin novedades que destacar. Sólo que me siento más cansada. No puedo estar mucho tiempo de pie. Las ingles me duele como si se estuvieran estirando (por las noches al cambiarme de lado en la cama, hay veces que me despierto del dolor). Y nada más, esperando que pasen los días porque ya no vuelvo a ver a mi sueño hasta la semana 18, desde la 13 que no lo veo, son 5 semanas que se me hacen eternas.







3 comentarios:

  1. Después de leer todas las entradas me he quedado chafada al ver que no hha continuado! Espero que todo saliera muy bien. Un abrazo!

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  2. Nos tienes intrigadas.. cuentanos tu desenlace.. lei en un comentario de julio 2017 q estabas de 35 semanas asi q imagino todo salio bien.. haznos un resumen.. y cuentanos que tal tu "nueva" vida con "tu sueño" en brazos. Mil besos y cuidaros!!

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    1. Perdon por la tardanza en responder. Me estuve preparando unas oposiciones y deje el blog abandonado. Mi niño tiene ya 2 años!! y ahora voy de nuevo a la aventura para darle un hermano con los embriones congelados que me sacaron.
      Prometo actualizar todo esto.
      Espero que tus sueños tb se hayan cumplido.

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